Este es uno de los mitos de las cucarachas, pero es mentira: así puedes evitar plagas en casa

Cuando me mude a la ciudad nadie me advirtió sobre las cucarachas. Antes de cumplir mi sueño de independizarme y mudarme a la ciudad, yo vivía en un pueblo   dentro de la Ciudad de México, pero a las afueras. Todo era bosque, agua, árboles y  algunas ardillas que tenían su habitad natural y donde rara vez pasaba algo inusual.

Cuando me acerqué al corazón de la capital fue que noté que había cucarachas por todos lados. No importaba si iba a un café fifi en La Roma, a un concierto en Iztacalco o al Cine en alguna plaza, siempre que hubiera civilización, departamentos o restaurantes, había una cucaracha cerca y una de las primeras cosas que supe de ellas fue que: no las pises porque te vas a llenar de plaga.

Por qué pisar una cucaracha te puede llenar de plaga

El mito es el siguiente: las cucarachas siempre están embarazadas, por eso si pisas una te puedes llenar de plaga. Sin embargo, esto es falso, las cucarachas no siempre están embarazadas, pero se reproducen rápidamente. De acuerdo con la firma multiplag, la mayoría de las cucarachas se reproduce en los meses más cálidos, dependiendo de la especie.

El ciclo de reproducción de una cucaracha comienza con la puesta de huevos por la hembra. Estos se depositan en una cápsula llamada ooteca, adherida a superficies o escondida en lugares oscuros. Durante el apareamiento, el macho es el que provee para fecundar los huevos de la hembra, aunque es importante decir que si hay ausencia de varón, una cucaracha hembra puede llegar a ser hermafrodita y reproducirse a sí misma.

Una vez que esto pasa, los huevos eclosionan en un tiempo estimado de entre 15 y 45 días, y las crías cucarachas son conocidas como ninfas o larvas. Estas ninfas pasan por varias etapas de maduración hasta llegar a la edad adulta. Una vez que alcanzan la madurez sexual, las cucarachas están listas para reproducirse de nuevo.

Sabiendo el ciclo, podemos decir que las cucarachas no siempre estén embarazadas, pero en caso de estarlo y llegarlas a aplastar, esto ocasionaría que la ooteca, o cápsulas de huevos, se rompan y dispersen los huevos, lo que podría resultar en una infestación más amplia cuando eclosionen. Además, las cucarachas pueden transmitir enfermedades, y aplastarlas puede liberar bacterias y alérgenos en el aire, de acuerdo con algunos servicios de control de plagas. 

Trucos para evitar plagas de cucarachas en casa

• Mantén la limpieza en casa: Uno de los amantes de las cucarachas es la suciedad, por lo que debes asegurarte de que tu hogar esté limpio en todo momento, especialmente la cocina, que es donde se acumulan restos de comida.
• Sella grietas y aberturas: Inspecciona regularmente las tuberías, cables y conductos de tu hogar. Si encuentras grietas, ciérralas con selladores o masas resistentes a insectos.
• Utiliza mallas en desagües: Coloca mallas en los desagües para evitar que las cucarachas ingresen a través de ellos. Estas barreras físicas pueden ser altamente efectivas para prevenir su acceso.
• Asegura puertas y aperturas: Instala burletes y sellos en puertas y ventanas para evitar que las cucarachas encuentren espacios para ingresar.
• Lava tus trastes: Una de las tareas más tediosas es esta, pero el peligro latente de que una cucaracha pueda, siquiera, considerar mi hogar como el suyo, me hizo el hábito de lavar todos los trastes y no dejar ninguno por la noche y mucho menos restos de comida.
• Elimina escondites: Las cucarachas buscan lugares oscuros y cálidos para esconderse, por lo que lo mejor es reducir la oportunidad de ocultarse al tener espacios despejados y limpiar regularmente detrás de los electrodomésticos  y debajo de muebles.
• Consulta a un profesional en control de plagas: Nunca está de más la ayuda de un profesional, por lo que puedes acudir a control de plagas cercano para pedirle consejos, trampas o trucos para evitar que en tu zona geográfica entren cucarachas.